Después del fin de semana, hemos vuelto a nuestro campamento de verano a pasarlo fenomenal para celebrar el inicio del curso y el final del verano... aunque todavía no adelantemos acontecimientos porque todavía queda mucho. Hoy, primero hemos ido a la piscina y como somos muy peques y tampoco hace mucho calor, con un remojón nos damos por satisfechos.
El resto del día ha estado muy entretenido, porque además de jugar en el patio a juegos de mayores como el matapollos o bulldog, también hemos estado en clase haciendo una manualidad muy divertida pero un poco pegajosa. Se llama pasta de sal, y la podemos hacer en casa con una taza de agua, otra de sal y dos de harina. Todo esto se remueve y se crea una pasta que parece plastilina (y que nos recuerda mucho al pan).
Con ella, hemos creado unas medallas de oro porque somos unos campeones; y una pelota de baloncesto que todavía se está secando en el patio junto con la medalla.
¡Mañana más!
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